El propósito de la revisión es un diagnóstico y tratamiento tempranos. Las pruebas de revisión generalmente se administran a personas sin síntomas presentes, pero que quizás tengan un riesgo elevado para ciertas enfermedades o condiciones.

Pruebas de Revisión

La principal prueba de revisión para la osteoporosis se llama una prueba de densidad mineral ósea (BMD): un método indoloro no invasivo que mide la masa de sus huesos. Una prueba BMD puede detectar la osteoporosis antes de que ocurra una fractura y puede estimar su riesgo de tener una fractura en el futuro.

Con una prueba BMD, su masa ósea es medida y después se compara ya sea con (1) un adulto de 30 años de edad (puntuación T) o (2) la masa ósea esperada para alguien de su edad (puntuación Z). Debido a que una BMD baja es común entre los adultos mayores, la comparación entre personas de su misma edad puede ser errónea. Los resultado de una prueba BMD indicará ya sea que usted tiene una densidad ósea normal, o una densidad ósea baja (llamada osteopenia), u osteoporosis desarrollada.

Existen varios tipos de pruebas BMD que se utilizan para revisar o diagnosticar la osteoporosis.

Indicaciones de Revisión

Actualmente no existe un consenso dentro de la comunidad médica sobre las pruebas de revisión de BMD. La decisión respecto a la revisión por lo general se realiza individualmente con base en sus factores de riesgo. La National Osteoporosis Foundation sugiere una revisión inicial de las siguientes mujeres posmenopáusicas:

• Todas las mujeres de 65 años o más, sin importar los factores de riesgo
• Las mujeres posmenopáusicas de menos de 65 años de edad con uno o más factores de riesgo para la osteoporosis (además de la menopausia) como:
  • Historial personal de fracturas de adulto
  • Historial de fracturas en un pariente adulto de primer grado
  • Ser actualmente un fumador
  • Pesar menos de 127 libras
  • Mujeres posmenopáusicas que actualmente presenten fracturas (para revisar la presencia de osteoporosis y determinar la severidad de la enfermedad)
  • Mujeres que estén considerando la terapia para la osteoporosis
  • Mujeres que hayan estado bajo una terapia de reemplazo hormonal por periodos prolongados